
No sabía que existiera un día dedicado a los desaparecidos, obviamente contra su voluntad. Esta mañana me he enterado de que precisamente hoy, 30 de agosto, es ese día: las Naciones Unidas lo han proclamado Día Internacional de los Desaparecidos.
Por supuesto, habrá quien argumente que hoy se recuerda a los desaparecidos y que mañana se recordará, con la misma ligereza -eso depende de quién lo recuerde, claro está- por ejemplo, a los enamorados. No caben comparaciones y creo que no es necesario justificar la necesidad de que existan estos días, marcados en el calendario internacional de los Estados, que nos devuelvan la conciencia de la precaria situación vital y de atentado contra la libertad y los derechos de millones de ciudadanos del mundo.
Lo triste del asunto es que sea imprescindible la existencia de un día en el que se conmemore a esas personas que han sido privadas de su libertad por la fuerza y por motivo de su etnia, sexo, ideas políticas, confesión, etc... Han sido separadas de sus seres queridos o, en los peores casos, asesinadas y todavía se desconoce su paradero. Que hoy conmemoremos una jornada como ésta revela mucho del estado de la cuestión y de la falsa democracia del mundo en que vivimos.
Por supuesto, habrá quien argumente que hoy se recuerda a los desaparecidos y que mañana se recordará, con la misma ligereza -eso depende de quién lo recuerde, claro está- por ejemplo, a los enamorados. No caben comparaciones y creo que no es necesario justificar la necesidad de que existan estos días, marcados en el calendario internacional de los Estados, que nos devuelvan la conciencia de la precaria situación vital y de atentado contra la libertad y los derechos de millones de ciudadanos del mundo.
Lo triste del asunto es que sea imprescindible la existencia de un día en el que se conmemore a esas personas que han sido privadas de su libertad por la fuerza y por motivo de su etnia, sexo, ideas políticas, confesión, etc... Han sido separadas de sus seres queridos o, en los peores casos, asesinadas y todavía se desconoce su paradero. Que hoy conmemoremos una jornada como ésta revela mucho del estado de la cuestión y de la falsa democracia del mundo en que vivimos.
No hay que permitir que caigan en el olvido: ni ellos, ni su lucha, ni su causa. Y hay que seguir buscando descubrir la verdad de sus casos para que se haga justicia.
Más información:
-Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos-Desaparecidos
-Proyecto Desaparecidos
-"Epifanía de los desaparecidos", por Marcos Aguinis (La Nación)
-"Casi 18.000 personas continúan desaparecidas por las guerras de la antigua Yugoslavia, según Cruz Roja"
-Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo (Colombia)
-Colombia: Sindicalistas en riesgo, Informe de Amnistía Internacional