21 de noviembre de 2008

Una de malos

Ya somos lo suficientemente mayorcitos como para saber que, en la vida, las cosas no son sólo blancas o negras, ni las personas buenas o únicamente malas. Se nos ha repetido por activa y por pasiva que existe una infinita gama de grises entre los que estamos ubicados todos. De acuerdo.

Pero no es menos cierto que "las meigas, haberlas haylas". Así que, sabiendo que todos los que se definen como buena gente tienen un punto de malicia y que, hasta los malos más malosos tienen su corazoncito, me encuentro en condiciones de afirmar, por haberla sufrido en propias carnes, que HAY GENTE MALA QUE TE CAGAS, PERO MALA, MALA.

Mala a más no poder. Tanto que, sinceramente, yo no les veo el rastro de bondad que alguna vez pudieron tener, aunque fuera en la más tierna infancia. También es verdad que hay criaturas que son todo menos angelicales...

En fin, lo peor es que estos malos y malas se creen la madre Teresa de Calcuta. Fíjate que hasta me dan pena, pobres, ahí, viviendo en su feliz ignorancia. Pero sin embargo le van jodiendo la vida a la gente sin que se les rompa una uña o se les despeine una greña. En realidad, disfrutan.

Sólo de pensar en algunas y algunos de esos malos de tres al cuarto -y no entro ya a hablar de genocidas, dictadores y malvados de ese calibre, que eso son palabras mayores y sería tema para otro post-, de los que a todos nos ha tocado sufrir, se me retuercen las tripas.

Mira, la verdad te digo que no vale la pena ni repetir su nombre mentalmente. Hay que aniquilar de la faz de la Tierra cualquier rastro de su actividad malévola. Y lo mejor para conseguirlo es que caigan en el olvido absoluto. Porque si los olvidamos, si los ignoramos, dejan de existir. Y con ese olvido también desaparece su poder de acción.
Ahora bien, habrá que advertir previamente a todo quisqui de cuál es su modo de actuar para prevenir a los amigos! Y a las almas candorosas!

En cambio, con los genocidas, dictadores y criminales que atentan contra los Derechos Humanos en cualquier parte del mundo y en cualquier época, hay que ser estricto y no olvidar nunca. Para que se haga justicia con las víctimas, para que nadie más vuelva a sufrir atrocidades similares.

Ahora que lo pienso bien, con los malos de tres al cuarto, con los mindundis de la maldad que actúan a pequeña escala pero que igualmente devastan vidas, aunque en otra proporción, también hay que ser firme. Y plantarles cara, para que sepan que a pesar de que están jodiendo, la víctima se lo recrimina en su cara y se defiende, aunque sea únicamente ejerciendo su derecho a la pataleta.

Pues bien, aquí y ahora ejerzo mi derecho a patalear contra cierta persona de género femenino a la que no tengo ningún reparo en tildar de MALA, MALA y MÁS QUE MALA. MALVADA. Ya no me da la gana de que me pises más sin decirte que sé cómo eres de vil y de mezquina.
Esto va dirigido a una sola persona con sus dos nombres y sus dos apellidos, pero si hay otras que se sienten aludidas... ellas sabrán por qué!!

4 comentarios:

fritus dijo...

¿Quien te ha hecho daño, reina?...que le hago vudú, le rayo el coche, le doy una somanta....

es broma. A veces hay gente que son como las cacas de perro...la mejor opción es esquivarlos con cuidado y seguir andando mirando hacia adelante. un abrazo

Judith dijo...

jajajaj, mil gracias fritus!
Pues por elegancia no voy a difundir su nombre en este medio, pero es alguien con quien he trabajado recientemente.
En fin, sí, tienes razón, lo malo es que ya me resbalé con esta caca de perro (¡¡qué buen símil!!). Ahora me toca limpiarme sus restos y seguir caminando.
Abrazos y a Vicky y Tanit, que la vi muuuuuuuuy simpática y muy bonita.

Yago dijo...

Hija, me acabas de dejar de piedra... como bien dice Fritus, si hay que coger el AVE y pegarse con alguien, aviso a Gonzalo, digo voy yo :o)

Ánimo y muchos besos y al hijoputa ese, que le jodan por malnacido... qué mal me ha caído sin conocerle...

Judith dijo...

Pero qué majos aquí los amigos!!!
Traqnuilos, tranquilos, que la sangre no llegará al río! Gracias mil, de todos modos.
El caso es que, en esta ocasión LA MALA ha sido una mujer, pero bueno, el efecto boomerang le devolverá su labor!
Besos!