28 de febrero de 2008

Más madera

Aquí va una nueva entrega de los mensajes que me llegan desde las paredes, muros y carteles que me voy encontrando en el camino. Y no será la última!!




Otras vidas

A veces nos sentimos como una pieza que no encaja en el rompezabezas general. Bogotá, febrero 2008.Aquí va otra de las reflexiones que se me van ocurriendo en estos días, muchas de ellas en esos momentos de duermevela o en esos otros durante trayectos en bus, caminando o en la sobremesa.
Estoy convencida de que uno de los mayores atractivos de los viajes es vivir otras vidas. Y me refiero a los viajes largos, planeados como algo individual y en los que se van conociendo gente y lugares nuevos en el camino, de forma algo improvisada y sorprendente. Es decir, cuando uno sale de su rutina, de su entorno y de su quehacer y se aleja también de las personas queridas, costumbres, olores y sabores habituales, la propia vida se plantea como algo nuevo, como un descubrir constante que, quizás, uno no se permite o no sabe cómo hacer en su vida cotidiana.
Lo que además le proporciona un valor añadido y liberador a la experiencia es que fuera del contexto propio uno se siente más libre, sin muchas de las ataduras culturales o circunstanciales que no sirven sino como represoras de las emociones o de los sueños.
Así que aquí estoy, viviendo otras vidas desde mi propia existencia, porque lo mejor de todo es que no se trata de vidas ajenas sino de una especie de vidas ocultas en la mía propia que, por fin, se deciden a salir.
Por eso me resultan imprescindibles los viajes. Aunque, hace ya algún tiempo que descubrí en la literatura y el cine esos otros espacios en los que vivir otras vidas. En realidad, se viven otras vidas liberadoras en todos aquellos espacios donde la imaginación, la ensoñación y la ilusión juegan un papel imprescindible.

27 de febrero de 2008

Muchas cosas

Autoridades del Cabildo del CRIC en la Audiencia de denuncia y 37 aniversario de la organización indígenaTodos los días pasan muchas cosas y que diga esto no supone ninguna novedad para nadie. Pero hay días que son mucho más, digamos, "noticiosos".
Hoy he leído rapidito algunos titulares porque no me daba el bolsillo para más tiempo de conexión a Internet, es decir, para leer todas las noticias que me interesaban. Y veo que ayer Bardem ganó el Oscar!!!!!!!!! Ole ole!! Que vivan - si se me permite la grosería, pero que está relacionada, obviamente, con su carrera cinematográfica- tus huevos de oro, Javier!!!!
Esta es una gran noticia, pero también leo que Zapatero ganó a Rajoy, según sondeo popular, en el debate electoral televisivo de ayer. Bueno, tampoco me parece una mala noticia, aunque lamento no haber podido ver el debate para opinar por mí misma con conocimiento de causa y criterio propio.
Otra: Uribe colaborará en la liberación de los 4 secuestados de las FARC. Esto sueno realmente bien y empieza a salirse de la norma. Esperemos a ver qué hay detrás de todo eso. Quizás el apoyo popular para el cambio constitucional que le posiilite ser re-re-elegido. O buena voluntad?? En fin.
Pero la noticia que me llega más fuerte porque la he vivido en directo durante todo el día ha sido la reunión de los indígenas llegados de todos los resguardos y municipios del Cauca colombiano para denunciar su permanente lucha por la recuperación de sus territorios y sus derechos. Una lucha que encabezada por el Consejo Regional Indígena del Cauca cumple 37 años, pero que encabezada por miles de personas y líderes anteriores lleva más de 500 años.
Y la lucha no ha acabado.

23 de febrero de 2008

Imágenes con mensaje

Creo que en Colombia la práctica totalidad de paredes, muros y superficies públicas tienen un mensaje. Es posible que yo me esté fijando especialmente en eso porque cuando uno viaja está más atento a todo, más observador. Pero me inclino más a pensar que los colombianos tienen mucho por lo que protestar y, además, son bastante contestatarios en general. Al menos más que la gente de allí donde yo vengo.

Así que aquí va una breve selección de las joyas que gritan las paredes, cabinas y carteles en Colombia. Prometo nuevas entregas de esas imágenes-mensaje-protesta.

La imagen de la Universidad Nacional que no pude tomar en su momento, pero que finalmente no se me escapó

Uribe miente, dicen las cabinas telefónicas de Popayán

Pablo Escobar habla de su experiencia pendenciera aún desde la tumba

Desde la alcaldía de POpayán se intenta elevar la moral de sus ciudadanos desde la señales de tráfico, a pesar de los momentos de tensión que vive la zona a menudo

Lluvia, llover, llueve

Ocho días aquí y puedo afirmar que en Popayán llueve todos los días. A mí tanta lluvia me deprime un poco, la verdad. Así que le propongo un cambio de unos diítas al Dr. Clima: que cese el aguacero por un tiempo por estos lares y que envíe hacia España la lluvia.

Pongamos que se vaya una semanita de vacaciones al otro lado del Atlántico y que vaya a conocer un poco el Mediterráneo. De no ser así, en unos 20 años máximo, la mitad de España se habrá convertido en un desierto. Porque en todo el último otoño, época pluvial por excelencia por allí, sólo ha llovido dos o tres veces, al menos en Barcelona. Las restricciones y cortes en el servicio de agua a la población están a la vuelta de la esquina. ¿Qué tal esta propuesta de re-cambio climático?

Alicia pide un deseo, que llueva en España y que deje de llover unos días en Popayán

20 de febrero de 2008

Dios la ayude, madre

En Colombia, en ciertos contextos y momentos, la gente llama a las mujeres "madre". A mí eso me resulta muy bonito cuando oigo que se lo dicen a las personas ya un poco mayores, porque implica un reconocimiento y un respeto muy sincero.
Pero ahora que una ancianita me lo acaba de decir a mí, "Dios la ayude, madre", me ha parecido un poco extraño porque no soy madre y, sobre todo, porque quien merece todo mi respeto era esa señora que ya ha caminado mucho tiempo por la vida -por la que muchas veces a mí se me hace difícil continuar.
Y como me ha visto escribiendo en mi pequeña libreta -estos apuntes-, finalmente me ha deseado: "Que le salga muy bien su tarea". Gracias, madre.

De autonomía y autosuficiencia

En estos días en los que algunas naciones declaran su autodeterminación e independencia -como Kosovo, lo cual colateralmente implicará no pocos debates en España en relación a la independencia de Catalunya o de Euskadi-, yo me veo en esta misma diatriba, pero a escala personal. Vayamos por partes.
Desde pequeña me han enseñado, principalmente mi madre, que tengo que ser lo más autónoma posible en todas las facetas de la vida, para no depender de nadie sino de mí misma. Y creo que ésa es una lección que he aprendido tan bien que, a veces, me parece que inspiro cierto miedo, recelo o desconfianza, sobre todo en hombres de educación tradicional y machista (aunque ni ellos mismos sospechen que se dirigen como tales).
El caso es que cuando estás acostumbrada a hacer lo que quieres o a ir a donde te propones por ti misma, sin la necesidad de que nadie te acompañe, resulta muy pero que muy difícil habituarse de nuevo a depender de alguien.
Digamos que yo declaré mi independencia, autonomía y autodeterminación hace bastante tiempo. A pesar de que normalmente prefiero compartir con alguien, si nadie quiere apuntarse al plan, respeto su opción y eso no significa para mí que el plan se cancele. Hago lo que me había propuesto, independientemente de si a alguien más le apetece. Con lo cual, en un entorno menos propenso o totalmente opuesto a esa forma de actuar -y no hablemos de si es una mujer la que así se dirige- pues bueno, una se siente como si le hubieran cortado las alas.
Y de este modo me encontraba yo, paseando un domingo, tranquilamente sola por Bogotá por un barrio popular, en el que todas iban acompañadas de todos, por lo cual creí que era observada con rareza. Es posible que esa fuera simplemente mi percepción, pero creo que podría ajustarse bastante a la realidad.

18 de febrero de 2008

Caminante Profesor Moncayo

Cantando la vida es más alegre. Popayán, 17 de febrero de 2008Otro día escribiré con más detenimiento sobre mi alucinante y surrealista experiencia de llegada a Popayán, en el departamento colombiano del Cauca, al Suroccidente del país. Como digo, eso será en otra ocasión porque, tres días después de haber llegado, cuando por fin ayer conseguí salir a conocer el centro gracias a Vicky (una amiga de Marita y de Luis), nos topamos de lleno con nada menos que el Profesor Moncayo, el Caminante por la Paz.

Poniendo en antecedentes a todo el mundo, el Profesor Moncayo, conocido como "El Profe", es un señor que un día de hace 10 años y dos meses tomó la determinación de caminar todos los caminos del mundo para conseguir que las FARC liberaran a su hijo, un joven policía a quien secuestraron. Ahora hace ya bastante tiempo que ese grupo guerrillero no envía ninguna prueba de vida del chico, pero El Profe no pierde el ánimo y sigue con su reivindicación de paz y demanda de acuerdo humanitario entre el Gobierno colombiano y todo los grupos violentos (narcoguerrilas y narcoparamilitares principalmente) que amenazan la vida del país.

L apaz es posible con el diálogo real. Popayán, 17 de febrero de 2008
Encontrarme en Colombia y por casualidad -aunque las casualidades no existen- con el señor Caminante por la Paz fue una agradable sorpresa, ya que no pude acudir a mostrale mi apoyo cuando visitó Barcelona. En Popayán conocí a un hombre risueño, que cantaba alegres canciones mientras tocaba una guitarrita pequeña, de la que ahora no recuerdo el nombre. También portaba una flauta a modo de "arma" para la paz. Como siempre, la música conjuga lo mejor de las personas y el Profesor Moncayo es un claro ejemplo de que existen caminos posibles para la paz, sólo hace falta creer en ellos y ser lo suficientemente valiente como para explorarlos.

Ojalá que el hijo del Profe pueda reunirse, en breve, con ese maravilloso padre coraje que no ha dejado de dar la cara por él ante el mundo desde hace más de una década.

El Profe Moncayo estará en Popayán 10 días. Popayán, 17 de febrero de 2008
Quiero animar a aquellos que estén por Popayán en estos días y además lean este blog (¿será que alguien habrá?) a que visiten al Profe en su tienda de campaña, instalada a medio camino entre el Puente del Humilladero y el Parque Caldas. Allí permanecerá 10 días (ahora serán ya 8) explicando su historia a quien le quiera escuchar. Y por supuesto, en más de los míseros 5 minutos que le concedieron en España, en la reunión internacional antiterrorista a la que fue invitado por el Gobierno de Zapatero (aunque creo que si hubiera sido el de Rajoy, ni hubieran contado con él). Además, mañana martes día 19 de febrero, a las 14h habrá un encuentro conél en la Universidad del Cauca, quizás en le Paraninfo o en la Facultad de Salud. "¡¡¡Háganle!!!", como dicen por aquí.

14 de febrero de 2008

Helicópteros

Ahí está de nuevo el helicóptero. Cuando cada día llega a la mitad, empieza el espectáculo. Sobrevuela hacia la derecha, luego regresa hacia la izquierda y vuelve a pasar en diagonal.
El caso es que, es posible que se trate únicamente de pasadas de reconocimiento militar. Pero eso yo no lo sé y no estoy familiarizada con ese despliegue que, más que otra cosa, a mí me asusta. Debe ser como todo, cuestión de acostumbrarse.
Aunque esto te deja con una sensación de vivir en una situación de permanente alerta que, la verdad, no es nada recomendable y mucho menos tranquilizadora.
Con ello quiero decir que, si ante unas simples sobrevoladas de helicóptero una se siente inquieta, prefiero no saber lo que es el vivir constantemente en peligro real, sin libertad y a expensas de la voluntad de unos pocos violentos.

13 de febrero de 2008

El mundo a sus pies

Domingo tarde y todas las tiendas abiertas. Cosa rara en otro lugar pero no en Colombia.
Me decido a adentrarme en un barrio popular, pero aparentemente poco atractivo. En realidad el ambiente y el bullicio es por lo que a mí me resulta interesante.
Tras revisar los escaparates de infinitas zapaterías y responder a los requerimientos de los vendedores diciendo que sólo estaba mirando, accedo a dejarme cuidar por la chica de la penúltima tienda.
Aquí las mujeres, por lo general, son más bajitas que yo, con lo cual calzan zapatos chiquitos. Conocedora de esa premisa, respondí a la pregunta: "A la orden. ¿En qué puedo ayudarla?", diciendo lo siguiente: "¿El número 40 de estas botas, por favor?". Y efectivamente, la expresión de la chica fue todo un poema. "¡Uff! Lo voy a mirar, pero no creo. Aunque este 39 es de horma grande"- prosiguió, convincente. Pero no lo suficiente para mí.
Así que ella, incansable, me sorprendió con lo siguiente: "A la orden. Pero si quiere, en 3 días se lo tienen a la medida de fábrica". A eso le llamo yo buena atención al cliente. Te tratan como a una reina, ponen el mundo a tus pies, como rezaba el cartel de la puerta de la tienda. De lo más certero.

12 de febrero de 2008

In / Out

Hoy sólo quiero destacar los titulares de noticias que me parecen un logro o un desastre, son IN o OUT.

IN:
1. Spielberg no irá a los JJ OO. El director renuncia al cargo de director artístico por la política de China en Darfur.
2. Australia pide perdón a los aborígenes.
3. Juicio a 17 colaboradores de Pinochet.

OUT:
1. Vía libre para la pena de muerte en Guatemala.
2. El Gobierno de Uribe rechaza una marcha contra los paramilitares. El Gobierno colombiano no participará en una marcha contra el palamilitarismo convocada para el 6 de marzo por una ONG.
3. Reino Unido vetará a los internautas que descarguen música o vídeos. El Gobierno británico prepara un proyecto de ley que obligará a los proveedores a desconectar a quienes bajen contenido audiovisual

11 de febrero de 2008

Fassbinder

Cada siete años, se produce un año con 13 fases lunares, lo cual afecta de forma fatal en el estado de ánimoIncreíblemente, recordé cómo llegar al cine Teusaquillo dos años después de haber ido por primera vez y no haber vuelto más. Creo que mis pasos me llevaron hasta allí de forma premeditada para ellos aunque no para mí.
Este cine está situado en el barrio del mismo nombre, Teusaquillo, en Bogotá claro. Es de esos clásicos cines que aquí llaman teatros, por la traducción literal del inglés, como tantas otras cosas. Teatro de marquesina con neón blanco en el que se coloca el título de la película a base de letras sueltas sobre renglones negros.
Pues bien, mis pies me condujeron hasta el Teusaquillo para descubrir que había programa especial de directores alemanes: Herzog, Fritz Lang y Fassbinder. Qué paradoja. Me paso dos años y medio trabajando con alemanes y ahora, en Colombia, me meto en la sala a ver cine alemán. Y, por supuesto, elegí Rainer Werner Fassbinder, uno de los preferidos de Edi, mi profe de guión. Y qué fascinante, porque el Teusaquillo tiene sesión matinal. De hecho, en Rololandia -alias Bogotá- la práctica totalidad de los cines del tipo Cineforum, tienen esas estupendas sesiones. Me encantan porque es cuando más disfruto el cine, de día, bien despierta. Las sesiones golfas -de madrugada- de Barcelona pueden conmigo y acabo luchando contra el sueño.
En fin, "Un año con trece lunas" de Fassbinder, a las 2 de la tarde y con sólo tres personas más en el Teusaquillo, todo un lujo. Y como siempre pasa con las buenas películas y los libros, llegan en el momento justo.
Erwin/Elvira, el/la protagonista de esta peli, dijo tal cantidad de verdades que me fue imposible apuntarlas o memorizarlas todas. Y la percepción del encuadre del director era tan certera, llena de significado y de una estética tan personal y maravillosa, que desde ya me confieso fan total.
Dicen que cada siete años, se produce un año con 13 fases lunares, lo cual afecta de forma fatal en el estado de ánimo. A Erwin/Elvira le tocó sufrir una de esas fases de fuerte depresión y, a la vez, de gran lucidez. Y aquí va una de las joyas que conseguí capturar de boca de Elvira: "Mi ego tuvo que aprender a soportarme, a aguantar lo inaguantable". A todos nos pasa eso, aunque no lo admitamos.

10 de febrero de 2008

Todo cuerpo pesa

"Todo cuerpo pesa". Así reza el letrero de bienvenida a la Universidad Nacional de Bogotá. Lo vi de camino a Ciudad Bolívar y me quedé tan perpleja que no me dio tiempo de reaccionar y tomar un foto.
Aquí, los cuerpos que pesan son cientos de miles: los de las personas muertas y desaparecidas a causa de más de 40 años de la violencia. Incluso yo noto su peso, aunque este conflicto me llega colateralmente porque no soy colombiana, pero sí tengo amigos que lo son. Y, en cualquier caso, el dolor ajeno y la injusticia siguen pesándome por más que el mundo parezca no ofrecer, a menudo, otra cosa.
Todavía no soy inmune al dolor: cada cuerpo pesa.

9 de febrero de 2008

Ciudad Bolívar

Las niñas de la señora Luz. 8 de febrero 2008, Ciudad Bolívar
Luz Dary (creo que se escribe así pero no estoy segura) tiene 33 años, 1 hijo preadolescente, 3 niñas, 3 perros, una casita, una fundición casera y comparte su trabajo con Juan Carlos, al que todos llaman Fernandito. También comparte, aunque ninguno de los dos lo admita, su vida, sus alegrías y desvelos -y quien sabe si algún día su corazón- en Ciudad Bolívar.
Para aquellos que no lo sepan, Ciudad Bolívar es el megasuburbio del sur de Bogotá, habitado por los más desfavorecidos socialmente y es adonde han llegado en los últimos años las tristemente numerosas oleadas de desplazados por la violencia en Colombia. Por supuesto, va creciendo desproporcionadamente al resto de la ciudad, en unas condiciones de habitabilidad bastante penosas para sus pobladores. En definitiva, y como además de pobre tiene fama de peligroso (se dice que hay muchos informantes de las FARC, aunque también de pandillas e incluso de paramilitares), es el lugar por el que nunca se dejará caer el colombiano medio -mucho menos de clase acomodada-, por no hablar del foráneo, tipo yo.
Pero a mí se me presentó la ocasión de acompañar a unos amigos que grababan un docu en Ciudad Bolívar y, como no podía ser de otro modo, no me lo pensé ni un segundo. Estuve dos días en los que conocí a esta mujer, Luz Dary, a su encantadora y alegre familia (a pesar de las circunstancias), su vida y la amenaza que la obligó a dejar su pueblo en el departamento del Tolima, hace 6 meses.
No les olvidaré y espero volver algún que otro rato a pasar con ellos otro día bonito y revelador sobre lo que verdaderamente importa en la vida.

7 de febrero de 2008

Buscadores

Vi un programa en televisión en el que un tipo se definía a sí mismo como buscador, pero buscador de rincones en su propia ciudad (Barcelona, para más datos).
Yo no sabía muy bien cómo catalogar esa parte de mí, de mi afán por los paseos perdidos, sin rumbo fijo por mi ciudad. Pero al escuchar lo que él decía y ver lo que hacía supe que éramos iguales. Buscadores de historias, buscadores de detalles, de lo raro, de lo especial, de sonrisas, de llantos callados, de esquinas oscuras y de haces de luz.
Ya he dicho que Bogotá -la metrópolis en sí y no su gente- no es un lugar amable ni acogedor para el extraño. Ahora sé que se trata de una ciudad para buscadores.

6 de febrero de 2008

Lejos

Vigilante nocturno armado con perro en la Krr. 14 con la 39. 4 de febrero de 2008, el día de las marchas contra las FARCLa voz metálica del Transmilenio me ha dicho que eran las 21 horas del 5 de febrero de 2008. Y que acabábamos de llegar al Portal de la 80, la última parada. De ahí me quedan 15 minutos más a casa, en lo que aquí llaman alimentador, es decir, un bus lanzadera.
Hace frío y quiero llegar ya. Bogotá no es una ciudad acogedora, es gris. No está pensada para pasear, no es un lugar lo que se dice bonito. Es intrigante, con zonas de encanto decadente y creo que algo hostil con el turista. Por eso no se ve prácticamente ninguno, y menos fuera del centro, de La Candelaria.
Eso es lo que les gusta a los bogotanos que viven fuera del país: al volver a la ciudad no se encuentran con esa invasión que padecemos los pobres ciudadanos de otras capitales como Barcelona.
A mí también me gusta que no haya turistas, porque la ciudad respira más su ambiente, pero una se siente al mismo tiempo muy, pero que muy fuera de lugar. Todo el mundo advierte con una mirada mi condición de extranjera, al menos de no bogotana. Y ya no digamos al abrir la boca. Ellos y yo hablamos español, pero es como si se tratara de otra lengua: diferente musicalidad, diferentes fórmulas de cortesía, diferentes formas de orientar las frases, distintos significados para las mismas palabras. Pero en eso, al menos, ya tengo cierto entrenamiento.
Ésta es la tercera vez que visito Bogotá y, paradógicamente, se me hace más lejana, menos amable, menos mía. Quizás sea porque he perdido el factor sorpresa, posiblemente se deba a la percepción emocional que tenía antes de ella. No sé. Aún me quedan unos días aquí, pero no quiero que sean demasiados porque creo que, en ese caso, Bogotá va a dejar de gustarme.

5 de febrero de 2008

Por dentro

La chica que se sentó frente a Laura lloraba, pero por dentro. Tenía los ojos humedecidos. Algún hondo dolor, de tan fuerte, le retenía las lágrimas y no las dejaba caer resbalando por la cara.
Laura también lloró por dentro de ver tanta tristeza.
La chica que se sentó frente a Laura quizás sólo fuera un fantasma, un espejo en el que se reflejaba.

1 de febrero de 2008

Walking on the Moon

"Giant steps are what you take
Walking on the moon
I hope my legs don't break
Walking on the moon..."


Llevo varios días tarareando esta canción de The Police y, la verdad, ahora le encuentro sentido. Estoy caminando sobre la Luna, dando grandes pasos, flotando unos segundos por cada salto. Hoy mi luna se llama tomarme un tiempo para hacer lo que quiero, cuando quiero y como quiero. Sé que se me van a presentar obstáculos en este viaje espacial, por eso espero tener fuerzas para resistir y que mis piernas puedan seguir el ritmo.

La nave ya ha despegado y ahora, el Voyager JBR reposta combustible y se prepara para la siguiente parada, surcando las estrellas. Hasta el infinito y más allá.